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Escudo de Argentina

Los símbolos patrios son la identificación de un estado nación, concitando una multitud de valores que se dispusieron y se tratan de representar a lo largo del tiempo. Se suele hablar, entre los principales, de la bandera, el himno y el escudo. A continuación hablaremos del último, al presentar todo sobre el escudo de Argentina: origen, descripción y simbología. 

Origen del escudo de Argentina

El escudo de la nación Argentina tiene un origen y consiste en la fiel reproducción del sello que el 12 de marzo de 1813 empleó la Soberana Asamblea General Constituyente de las Provincias Unidas del Río de la Plata, fungiendo como forma de autenticar actos gubernamentales. La famosa Asamblea del año XIII había comisionado al diputado de San Luis, Agustín Donado, la confección de un sello para autenticar los actos del gobierno independiente, en una forma de reemplazar al hasta entonces utilizado con las armas reales de España.

Más allá de eso (y de quienes intervinieron en la confección, como el cuzqueño Juan de Dios Rivera), el escudo también tiene un claro antecedente en el emblema de un grupo revolucionario francés, para acceder a la Asamblea Legislativa entre 1790 y 1793 en dicha nación. Podemos decir que tiene similitudes este último caso, pero también diferencias: más referencias marinas que celestes y el sol, no es el Sol de Mayo, con una clara alusión incaica en el modelo argentino. 

Entonces hablamos de un modelo que antecedió al blasón nacional de 1813, posiblemente llegado a tierras argentinas por algún autóctono que vivió en Francia en esos años turbulentos o incluso un jacobino que luego fuera parte de la historia de la independencia argentina (por ejemplo, Manuel Belgrano tenía como gran amiga a Elisa Pichegru, una jacobina refugiada).

Descripción del escudo de Argentina

El escudo de Argentina es un óvalo cortado, con su campo superior en azur (azul) y el inferior de plata (blanco). Hay dos antebrazos humanos que estrechan sus diestras en el cuartel inferior (y no la siniestras, que podría interpretarse como nocivo o de mal augurio).

El gorro de gules (frigio) cuenta con una borla y es sostenido por la pica, que es una lanza corta. El sol naciente en verdad posee un total de 21 rayos flamígeros, once de los cuales son rectos y el resto ondulados. Bordean la elipse dos ramas de laurel sin frutos que no llegan a entrecruzarse en lo alto: la derecha de 21 hojas en el lado interior y 20 en el exterior; la izquierda 23 hojas en el lado interior y 25 en el exterior.

Finalmente, al pie, en la punta inferior del escudo, se exhibe una cinta en forma de moño con los colores azur, plata y azur (en esa ordenación), similares a los de los dos cuarteles.

Simbología del escudo de Argentina

Todo escudo (y en un sentido genérico todo símbolo patrio) posee determinado simbolismo. El escudo argentino, por supuesto, no es la excepción: se considera que los antebrazos humanos que estrechan sus diestras en el cuartel inferior representan la unión de los pueblos de las Provincias Unidas del Río de la Plata. El gorro frigio, por su parte, es un antiguo emblema de la libertad y la pica es el propósito de sostenerlo, si es necesario, con la utilización de las armas.

Por otro lado, el famoso Sol incaico en su posición naciente indica el nacimiento para el mundo de una nueva nación. Los laureles, que de por sí son un símbolo heráldico de victoria y triunfo, evidencian las glorias ya adquiridas en los campos de batalla (esas que permitieron al pueblo deshacerse del yugo español). Finalmente, la cinta en forma de moño en el pie o zona inferior del escudo es una representación del pueblo argentino desde el elemento etéreo de la nacionalidad.